5 razones para estudiar Derecho

Puedes manejar la verdad. La profesión de abogado es una de las más desafiantes, prestigiosas y bien recompensadas que existen. Se marca la diferencia en la sociedad, defendiendo a los inocentes y persiguiendo a los culpables. Los abogados son los soldados de primera línea del sistema de justicia y se aseguran de que los derechos de sus clientes sean escuchados.

Esto incluye defender y promover los intereses de las empresas, ofrecer una representación justa a los acusados, sea cual sea su delito, y ayudar a cualquier individuo a intermediar en sus disputas con otro. La profesión de abogado engloba el rico tapiz de la sociedad -desde sus rincones más oscuros hasta sus estadios más virtuosos- con la luz de la ley como guía para navegar por los pasillos de la justicia.

Si quieres convertirte en abogado, hay muchas razones fantásticas para hacerlo. A continuación, te diré ocho razones para estudiar Derecho en la universidad, licenciarte en Derecho y convertirte en abogado.

1. Marcar la diferencia

El derecho es el agente y depositario del cambio en la sociedad. Como abogado, defiendes tus argumentos utilizando los preceptos de la ley. Toda la sociedad que vives en el día a día es el resultado de que todos funcionemos juntos bajo un código de leyes. Desde que Hammurabi de Babilonia concibió un sistema legal (y probablemente antes), los seres humanos han vivido según la ley de la tierra.

Pero esas leyes pueden cambiar, pueden ser traspasadas, pueden ser aplicadas injustamente. Como abogado, tu trabajo es defender los derechos de la población contra los intereses malignos. Si un propietario exprime a sus inquilinos y no mantiene la propiedad, si se discrimina a un miembro de una minoría o si una tienda minorista realiza prácticas abusivas, son los abogados quienes llevan el caso ante el juez.

No siempre es tan intenso. El cumplimiento eficiente y competente de los variados y extensos requisitos legales que cambian de un estado a otro y a lo largo del tiempo es una habilidad inmensamente valiosa. Estudiar Derecho te da las herramientas para engrasar los engranajes legales de algunas organizaciones masivas y garantizar que actúan dentro y al servicio de la ley.

Trabajando en tus condiciones y llevando los casos que quieras, puedes marcar la diferencia y defender los derechos de tus demandantes o incluso crear un nuevo precedente como resultado de ganar con éxito un caso emblemático.

Razones para estudiar derecho

2. Recibir una remuneración excepcional

Todo es cuestión de dinero, dinero, dinero. La de abogado es una profesión famosa y bien remunerada. Por algo trabajan muchas horas. Los conocimientos extremadamente especializados que poseen los abogados hacen que puedan percibir unos honorarios elevados cuando trabajan a título individual. Si trabaja en un bufete de abogados, los salarios medios son muy, muy superiores a la media, ya que el salario medio de los abogados en EE.UU. es actualmente de 144.230 dólares, que varía según el estado. Por ejemplo, el salario medio de un abogado de Nueva York es de 167.110 dólares. El potencial al alza aumenta exponencialmente a medida que te conviertes en un nombre en el que la gente confía. Incluso los profesores de derecho tienen un gran salario, ganando entre 105.000 y 200.000 dólares al año.

Por lo tanto, si quieres obtener un título que te dé la oportunidad de obtener un increíble potencial de ingresos nada más salir de la universidad, entonces un título de abogado es una sólida elección. No es fácil, pero la recompensa al final hace que valga la pena.

3. Ganar estatus y prestigio

Barack Obama y Mahatma Gandhi son líderes mundiales que estudiaron Derecho. Si nombras a Latham & Watkins, Jones Day o Sullivan & Crowell en una conversación, seguro que se te aguzan los oídos. Hay un montón de películas y series de televisión, como Suits, The Rainmaker y la película responsable de la cita inicial de este artículo, que dan glamour a la profesión de abogado y muestran lo apasionante que puede ser este mundo. Todo el mundo sabe que ser abogado es difícil y requiere una gran cantidad de intelecto, habilidad y fortaleza. Por ello, el trabajo lleva aparejada una gran cantidad de prestigio.

Tanto si se trata de luchar por un enorme bufete de abogados que representa a los mayores clientes internacionales, como de participar en los casos más destacados de las noticias, ser abogado está repleto de prestigio y estatus. Si quieres que la gente te respete incluso antes de conocer tu nombre, estudiar Derecho es una gran manera de conseguirlo.

4. Es desafiante y gratificante

La justicia. Dinero. Poder. Las recompensas de la carrera jurídica parecen interminables, y eso es porque si destacas en la carrera, lo son. Entonces, ¿cuál es el problema? El truco es que la abogacía es una carrera notoriamente difícil, con un trabajo diario que a menudo combina plazos muy estresantes, montañas de lecturas (que deben ser retenidas), y la capacidad de estar al máximo mentalmente a través de horas extenuantes, y nunca saltarse el ritmo todo el tiempo.

Así pues, si eres una persona que disfruta con los retos y que siente que acepta la intensidad en lugar de rehuirla, estudiar Derecho es una excelente opción. Sí, los grandes bufetes de abogados exigen jornadas regulares de 12 horas mientras gestionas las extensas carteras internacionales de los conglomerados. Como abogado privado, puedes estar despierto a todas horas preparando un caso en el que el ganador se lo lleva todo, y tú haces el discurso de apertura. Sin embargo, a través de toda esta adversidad llega la emoción de hacer algo que es un verdadero reto, de llevar tus propias habilidades y resistencia a sus límites mientras marcas la diferencia en el mundo que te rodea.

Aprendizaje, más importante que nunca

5. Tener una seguridad laboral completa

Los abogados son parte integrante del funcionamiento de la sociedad. Como los profesores, las enfermeras y los fontaneros. Si eres bueno en tu trabajo, sólo te quedarás sin trabajo si la propia sociedad deja de funcionar. Por suerte, tu trabajo diario es asegurarte de que no lo haga. Todo esto significa que estudiar Derecho es una forma estupenda de acceder a una carrera a prueba de recesiones.

Incluso si la economía se hunde, la necesidad de abogados no lo hace. De hecho, áreas del derecho como los litigios civiles, las quiebras y el derecho laboral aumentan de forma natural a medida que una mayor parte de la sociedad tiene que pasar por estos procedimientos. Incluso ante la reciente pandemia, los abogados han podido trabajar desde casa con pocos problemas. El poder judicial debe funcionar y el sistema de justicia debe seguir funcionando en todo momento, así que si estudias derecho y lo haces bien, nunca tendrás que preocuparte por no tener demanda, ya sea en la propia profesión de abogado o en la comunidad empresarial en general.